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lunes, 22 de agosto de 2016

CREEP de Cristopher Smith



Título: Creep
Director: Christopher Smith
Año: 2004
Guión: Christopher Smith
Intérpretes: Franka Potente (Kate), Vas Blackwood (George), Ken Campbell (Arthur), Sean Harris (Craig)

Inspirada en el terror que sufrimos todos los que cogemos frecuentemente el transporte público a altas horas de la noche, Creep es una cinta británica de terror que nos cuenta como una jovencilla en plena noche de fiesta se queda sobada esperando al metro en el andén de una estación londinense. Cuando despierte tiempo después, se encontrará con que la estación ha cerrado dejándola atrapada dentro y que hay un ser deforme rondando por la misma con sanguinarias intenciones.
Dirigida por Cristopher Smith, responsable de la más que recomendable Black Death (aquella película en la que Sean Bean y Eddie Redmayne perseguían a una bruja encarnada por Carice Van Houten en los tiempos medievales de la peste negra), esta es una película humilde en su concepto pero suficientemente efectiva en su desarrollo como para tenerte más o menos enganchado durante la escasa hora y media que dura. La verdad es que la mayor parte de ese efectismo se debe al escenario elegido para la acción, porque si bien hospitales, cementerios, casas encantadas y otros escenarios clásicos del cine de terror moderno están mas que explotados, el metro y demás localidades subterráneas no lo están tanto. Y es que el metro acojona. Túneles oscuros sin luz, sin gente, poblados de ratas y de aguas fecales y claustrofóbicos. Si a ello le añadimos un monstruo deforme y asesino ya ni te cuento. Así, sin llegar a ser una peli de "sustos", logra mantener un aura inquietante durante todo el metraje. Sin embargo, donde esta más pincha es en la concepción de ese ser deforme, el cual se nos presenta de manera más bien patosa como un niño que se ha criado en los túneles sin que ese origen quede nunca muy claro, cuando quizá hubiera sido mejor mostrarlo como alguien que se hubiera quedado atrapado en el subterráneo y hubiera perdido la cabeza, o directamente como un psychokiller que hubiera elegido el metro como terreno de caza.
Protagoniza la cinta la actriz alemana Franka Potente que por aquel entonces acababa de aparecer en las dos primeras entregas de la saga de Jason Bourne (su papel más gordo hasta el día de hoy) y apenas había salido del circuito de los telefilms germanos. Le acompañan una serie de secundarios completamente ignotos y un Sean Harris hipermaquillado interpretando a la criatura asesina, actor este último que cada vez se muestra como un profesional más solvente de lo que prometía, pues lo mismo te hace de monstruo como un papel de época como el que interpreta en la serie de TV de Showtime Los Borgia, te recita Shakespeare en la última adaptación de Macbeth de Justin Kurzel o te compone un gran papel de villano en una película mainstream de primera fila como es Misión Imposible: Nación Secreta. Habrá que seguirle la pista.
En pocas palabras, una cinta de terror aceptable de las de ver y olvidar después que perfectamente sirve para amenizar una noche cualquiera pero de la que no se puede exigir nada más.


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